Nuestra Historia
Tras la reforma agraria de la década del 60, el mundo rural comenzó a emigrar hacia los centros urbanos, de esto emergió una cocina única que comenzó a marcar una atención particular en la capital para el trabajador de la tierra, del esfuerzo y la tradición.
En 1962, en honor al abuelo de don Miguel Hormazábal, el local fue bautizado como “Restaurant San Miguel”, quién al poco tiempo lo rebautiza como el clásico “Palacio del Poroto Con Rienda”, plato que más solicitaban los clientes. Manteniendo la tradición y sus raíces, el local se convertiría en pocos años en el lugar favorito de las familias campesinas y visitantes de la época.
Décadas después, es considerado un imperdible de la cocina chilena, cuya identidad surgió de un amor tan especial por la cocina, donde dice la leyenda que “Un día don Miguel comenzó a cantar mientras cocinaba, y se cree que ese es el ingrediente místico de este tradicional restaurant”.